La Campaña Ropa Limpia exige a las marcas de ropa Zara, H&M y Gap que presionen a sus empresas proveedoras en Camboya. Estas grandes firmas de ropa tienen un enorme poder de influencia ya que son los clientes más importantes de las fábricas que despidieron a 318 personas trabajadoras por ejercer su derecho a la huelga.
La masiva protesta tuvo lugar el pasado mes de septiembre y sacó a la calle a más de 200.000 trabajadores y trabajadoras de cerca de 90 fábricas de Camboya. De esta forma, reclamaban aumentar el salario mínimo mensual a 93 dólares, un mínimo suficiente para cubrir sus necesidades básicas y las de sus familias. Tras tres días de huelga (desde el 13 hasta el 16 de septiembre), los sindicatos acordaron una negociación con el Ministerio camboyano de Asuntos Sociales. Pero cuando los/as huelguistas volvieron a sus puestos de trabajo se encontraron con despidos masivos y graves denuncias contra los líderes sindicales.
Casi cuatro meses después, las personas despedidas siguen sin trabajo y sin indemnización. Las empresas fabricantes hacen oídos sordos tanto a la orden judicial como a los mensajes del propio Gobierno de Camboya que exigen la readmisión.
¿Qué dice el Gobierno de Camboya?
Estas medidas contravienen la Constitución de Camboya y la legislación laboral. Además, violan los convenios de la Organización Internacional del Trabajo sobre libertad sindical y negociación colectiva. El Gobierno camboyano respondió instando a los empresarios a retirar los cargos judiciales y pidiéndoles que vuelvan a la mesa de negociación. Asimismo, declaró que no permitiría despidos.
¿Qué dicen los tribunales de Camboya?
A principios de octubre, los tribunales dictaron una sentencia en la que urgían a los empresarios a readmitir a las personas despedidas, así como a las suspendidas de empleo en un plazo de 48 horas. Los empresarios apelaron la sentencia y muchos se han negado a cumplir los requerimientos judiciales al no readmitir a las personas trabajadoras.
Mientras, las principales empresas que se proveen de estas fábricas: la española Zara, del grupo Inditex, la sueca H&M y la norteamericana Gap siguen siendo testigos silenciosos de esta grave vulneración de los derechos laborales. No en vano, Zara y H&M son las empresas que más pedidos tienen en Camboya. Por su parte, Gap se provee en la fábrica «United Apparel», involucrada en el grave caso de violación de derechos humanos contra el sindicalista Sous Chantha.
La Campaña Ropa Limpia internacional se ha puesto en contacto con las principales empresas de ropa que deslocalizan su producción en las fábricas involucradas para informar del conflicto y exigir la readmisión inmediata e incondicional de los/as trabajadores/as, así como una indemnización para compensar estos últimos meses sin salario. Algunas marcas han dado pequeños pasos, pero sus acciones han sido claramente insuficientes para obtener un impacto real. Por ello, sólo queda exigir públicamente a estos gigantes de la moda low-cost que actúen con urgencia sobre sus proveedores en Camboya.
Asimismo, está llevando a cabo una acción urgente instando al envío masivo de cartas a Zara, Gap y H&M para exigir a estas firmas que tomen cartas en el asunto.
Si tú también quieres enviar una carta a estas tres marcas, pincha aquí:
www.ropalimpia.org/firmas_Camboya
¡Exige a Zara, H&M y Gap que protejan los derechos de los trabajadores y trabajadoras que fabrican la ropa que inunda los escaparates de nuestras ciudades!