La Campaña Ropa Limpia ha conocido la terrible noticia del asesinato de Shahidul Islam. Shahidul era dirigente sindical de la Federación de Trabajadores de la Confección y la Industria de Bangladesh (BGIWF) y fue brutalmente golpeado por su activismo en favor de los derechos laborales en Tongi, Gazipur, Bangladesh. Durante 25 años, luchó por los derechos de los trabajadores y las trabajadoras como organizador sindical y murió luchando por sus convicciones. Queremos expresar nuestro más sentido pésame a su familia, amigos y compañeros.
El gobierno de Bangladesh debe investigar de forma inmediata e imparcial el asesinato de Shahidul Islam y tomar medidas punitivas contra los autores de este horrendo asesinato.
Shahidul, presidente del comité del distrito de Gazipur de la BGIWF, y sus compañeros fueron violentamente agredidos tras abandonar la reunión con la dirección de la fábrica de Prince Jacquard Sweaters Ltd. Habían acudido para ayudar a los trabajadores a cobrar las primas y los salarios que les debían. Pese a tener una orden de la autoridad competente del distrito de Gazipur, la fábrica se negaba a pagar los salarios al personal.
Según la primera información recabada a través de datos de importación, T.K. Maxx, Tessival, Global Fashion Icon, N.E Brands LCC, Suzy’s Inc, RD Style y New Yorker parecen abastecerse en la fábrica Prince Jacquard Sweaters Ltd. Los destinos principales de exportación son EE.UU., Canadá, Italia, España y Dinamarca. La Campaña Ropa Limpia está recopilando más datos sobre los compradores que se abastecen en la fábrica e iremos actualizando la información.
Cuando abandonaban la reunión, Shahidul y los demás representantes sindicales fueron abordados por un grupo que los atacó con violencia. Los agresores propinaron puñetazos y patadas a Shahidul, dejándolo inconsciente y gravemente herido. Fue declarado muerto en un hospital cercano. Su muerte representa una inmensa pérdida para el movimiento sindical de Bangladesh.
Sus acompañantes recibieron tratamiento médico pero no tuvieron que ser ingresados en el hospital.
«Shahidul movilizó a miles de trabajadores para que se afiliaran a los sindicatos, capacitándolos para convertirse en sólidos líderes a nivel de fábrica. A lo largo de su vida, ayudó a miles de personas a cobrar atrasos e indemnizaciones por despido denegadas injustamente por sus empleadores. Pensando siempre en las necesidades de los trabajadores, Shahidul y otros tres representantes de los trabajadores se reunieron la noche de su muerte para discutir una solución pacífica a un conflicto salarial y la paga extraordinaria del festival Eid-ul-Azha. La industria ha promovido durante el sindicalismo amarillo y ha desatendido las voces de los trabajadores y las trabajadoras. Su contribución al movimiento obrero ha sido notable y se le echará mucho de menos».
Kalpona Akter, presidente de la BGIWF
No es la primera vez que el sindicato BGIWF es víctima de un ataque mortal de este tipo. Hace once años, en abril de 2012, Aminul Islam fue torturado y asesinado. Aminul era también líder sindical de la BGIWF, un actor clave en el movimiento del país para promover los derechos laborales.
Los asesinatos de los sindicalistas ilustran las medidas extremas ideadas para reprimir la libertad de asociación en Bangladesh. Tememos que, al igual que el asesinato de Aminul en 2012, el de Shahidul Islam contribuya a la intimidación de los trabajadores y las trabajadoras, dificultando aún más la tarea de organización de los dirigentes sindicales. Según muchos testimonios, los trabajadores de Bangladesh son reprimidos sistemáticamente por los empresarios, que utilizan a matones y sindicatos amarillos para aterrorizar a los trabajadores que organizan sindicatos democráticos independientes.
«La CRL se une a todos los que lamentan la pérdida de Shahidul Islam. También nos solidarizamos con la BGIWF, con todos los que luchan por ejercer su derecho a la libertad sindical y con los numerosos trabajadores y miembros de sindicatos que siguen arriesgándose para defender los derechos y la seguridad de los trabajadores y las trabajadoras en fábricas de todo Bangladesh.»
Ineke Zeldenrust, coordinadora de la Oficina Internacional de la red Campaña Ropa Limpia, ha declarado
Shahidul deja una esposa enferma de cáncer y dos hijos, y era el único sostén de su familia.