Continúa el acoso a sindicalistas en DESA, la fábrica turca proveedora de la firma de lujo PRADA, entre otras. ¡Actúa ahora!

29/junio/2010 | Noticias

La Campaña Ropa Limpia (CRL) –Clean Clothes Campaign– anuncia que nos hemos visto obligados/as a relanzar la campaña internacional para reclamar justicia para los trabajadores y las trabajadoras de la fábrica turca de piel DESA.La empresa turca suministra artículos de piel a conocidas empresas europeas como la española El Corte Inglés y las británicas Marks and Spencer, Mulberry y Debenhams; siendo su principal cliente, la firma de lujo italiana Prada.La decisión de la CRL se fundamenta en el constante incumplimiento del acuerdo firmado entre DESA y el sindicato Deri Is hace ahora 10 meses. El fracaso del acuerdo es atribuible principalmente a DESA pero también a la falta de empeño y vigilancia de las empresas europeas que allí se suministran. Os invitamos a que contactéis ahora a DESA y a las marcas internacionales para expresar vuestra decepción ante la falta de aplicación del acuerdo. A través de la carta que proponemos podéis trasladar vuestra preocupación e indignación por la situación de indefensión de los y las trabajadoras, y reclamar que el acuerdo sea respetado y que se tomen medidas efectivas que protejan los derechos fundamentales de las  personas trabajadoras. Concretamente, el derecho a sindicarse.Actualización del caso:En los últimos meses, la CRL ha sido informada de que el acoso a los miembros del sindicato ha ido en aumento. Tenemos conocimiento de que al menos uno de los/as trabajadores/as ha presentado una denuncia en los juzgados contra uno de los supervisores de la fábrica.La decisión de DESA de despedir a dos miembros del sindicato aludiendo  disputas entre trabajadores es particularmente alarmante.El trabajador ümit Ugurlu fue despedido el 13 de mayo de 2010. Al parecer la empresa, sin previo aviso, dio por terminado su contrato laboral debido a que lesionó el dedo de un compañero de trabajo. Sin embargo, los trabajadores que presenciaron el accidente niegan este extremo y afirman que Necati Ata (el trabajador lastimado) tiró del guante del Sr. Ugurlu y al mismo tiempo, se hirió el dedo con una máquina. El sindicato ha iniciado acciones legales para reclamar su readmisión. El 9 de junio, a un segundo trabajador, Cemal Uyar, se le prohibía la entrada en la fábrica después de dos días de baja por enfermedad. El departamento de personal le informó de que habían rescindido su contrato de trabajo sin aviso previo porque se había ausentado sin pedir permiso y que, durante el tiempo de ausencia, habían confirmado que había estado trabajando en otro lugar.Dada la reciente historia de despidos ilegales por parte de DESA, sería de esperar que ahora se preocupasen por garantizar que los despidos tuvieron lugar sólo después de haber culminado una investigación y de haber gestionado de manera justo los conflictos laborales. El hecho de que la Dirección de DESA se sienta ahora libre de despedir a los miembros del sindicato sin pasar por el debido procedimiento es un indicio más del deterioro de la situación dentro de la fábrica. Antecedentes:En agosto de 2009, la empresa DESA y el sindicato Deri Is firmaron un acuerdo tras más de un año de intensa campaña internacional contra las prácticas abusivas de DESA.El acuerdo explicitaba que se pondría fin a la campaña internacional y a cambio DESA readmitiría a varios de los trabajadores despedidos, expediría un documento que garantizaría el derecho a formar un sindicato en la fábrica, reconocería al sindicato Deri Is como el único sindicato libremente elegido por los/as trabajadores/as y se comprometería a mantener una actitud neutra hacia la sindicalización de sus trabajadores/as. La CRL ha seguido de cerca la situación en la fábrica turca mediante un diálogo permanente con el sindicato con el fin de comprobar la aplicación del acuerdo. Desde el principio estaba claro que el protocolo significaba el comienzo de una nueva etapa durante la cual los trabajadores y las trabajadoras serían conscientes de sus derechos y se les aseguraría que el ejercicio de sus derechos no daría lugar a despidos o represalias. Para hacer esto realidad y que el proceso fuese creíble, hubiese sido necesario un cambio de actitud en la directiva de DESA y un apoyo proactivo por parte de los clientes europeos de DESA.En diciembre de 2009, una delegación de la Campaña Ropa Limpia visitó Turquía y se reunió con alrededor de 35 trabajadores y trabajadoras de DESA, junto con representantes de Deri Is. Las entrevistas revelaron que el acuerdo había sido violado en varios puntos:

  • Los/as trabajadores/as señalados/as por Deri tIs para ser readmitidos/as no lo habían sido
  • La garantía del tDerecho a Organizarse según ha sido formulada por la Federación tInternacional de Trabajadores del Textil, Vestuario y Cuero (ITGLWF tpor sus siglas en inglés) no ha sido distribuida en la fábrica
  • Los trabajadores y las trabajadoras tse enfrentan de nuevo a situaciones de acoso y represión claramente t orientados a evitar que se unan al sindicato
  • La Dirección de DESA interfiere de t manera activa para tratar de evitar que los trabajadores se afilien tal sindicato

A la luz de todo esto, en abril de 2010 la CRL se puso de nuevo en contacto con las empresas clientes de DESA para informarles de las vulneraciones que se estaban cometiendo y la falta de aplicación del acuerdo. Se les instó a trabajar con su proveedor para poner fin al hostigamiento hacia los/as trabajadores/as e interesarse por la puesta en práctica del protocolo firmado entre Deri Is y DESA.Algunas empresas respondieron por carta diciendo que habían visitado la fábrica, no habían detectado hostigamiento y aseguraban que no existían malas prácticas en la fábrica. Ninguna de las empresas clientes de DESA se puso en contacto con el sindicato o con alguno de sus miembros. Ninguna de ellas respondió a las detalladas propuestas que les fueron remitidas sugiriendo posibles actuaciones para defender en derecho a sindicarse en la fábrica.Escribe hoy a las empresas europeas clientes de DESA y a la dirección de la fábrica DESA. Pídeles que pongan en práctica el acuerdo y que adopten todas las medidas necesarias para garantizar un clima exento de intimidación en la fábrica.

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