Tras casi dos meses y medio de recorrido, la llama olímpica alternativa que encendió la campaña Juega Limpio 2008 (JL) por los derechos de las personas que trabajan en la elaboración de productos para las Olimpiadas, ha culminado su camino. Activistas de la campaña JL 2008 estarán hoy en Lausanne (Suiza) para entregar las más de 12.000 firmas de personas de 89 países de todo el mundo, que quieren hacer llegar a Jacques Rogge, Presidente del COI, un mensaje a favor de los derechos laborales. La iniciativa bautizada con el nombre «¡Pasa la llama!» comenzó en marzo, en los Países Bajos, y consistía en ir pasando una antorcha virtual por Bluetooth, SMS e Internet. Tras recorrer todo el mundo llegó a China el pasado uno de mayo, sin embargo, hasta hoy se han recogido firmas. España se sitúa entre los países que más apoyos ha recabado, de hecho, se han contabilizado más de 1.650 participantes través de Internet. Sólo le supera Austria con poco más de 2.000 firmantes.
Al igual que ocurre con el COI, la respuesta del Comité organizador de los Juegos Olímpicos de Beijing (BOCOG) resulta insuficiente, de modo que los activistas de JL 2008 han aprovechado para visitar el Museo Olímpico sito también Lausanne, y contribuir así a la exhibición que se muestra actualmente sobre Beijing 2008 y China.
Candidatura Madrid 2016
Juega Limpio 2008 exige que la candidatura de Madrid para la celebración de las Olimpiadas en el 2016 sea una candidatura limpia y respetuosa con los derechos laborales. Asimismo, alude a la responsabilidad que tanto el COE como la empresa proveedora del equipo olímpico español tienen en este sentido. Actualmente, la empresa patrocinadora del COE es la empresa china «Li Ning» y aunque su contrato termina en 2009 el COE ha afirmado en declaraciones recientes que quiere que sea una relación «duradera». No obstante, Juega Limpio 2008 valora de manera positiva el hecho de que el COE haya introducido una referencia a los derechos laborales en su código ético, tal y como se lo ha hecho saber a responsables de la campaña. Sin embargo, hay que seguir trabajando para proporcionar garantías de que no se producen violaciones de los derechos fundamentales del trabajo en la confección de la equipación de los deportistas españoles.